miércoles, 30 de abril de 2014

Opinión: El timo de Ali “El Babas” y los cuarenta ladrones, o también llamado el de los nigerianos.

Escucho un podcast del Camionero Geek, mientras hago las camas y paso la aspiradora, Tolo va leyendo y contestando correos electrónicos, su audio y publico al igual que un ser vivo va evolucionando, hay quien hasta le manda audios aclaratorios y tutoriales, para incluirlos en su podcast.

En un momento dado escucho que un tal Mohammed, que se encuentra la borde de la muerte le ha mandado un correo electrónico donde le ofrece la posibilidad en gestionar su herencia unos 18 millones de pavos norteamericanos (dolares), Tolo debe con ese dinero crear o invertir la pasta en algún tipo de orfanato o cualquier otro centro u organización benéfica que ayude a las personas, claro esta que Tolo a la vez que que se gana una plaza en el cielo por su buena acción, se embolsa además un 30% de la manteca, osea unos 5.4 millones de $.

Me retiro un momento los cascos, sonrío y pienso ¡coño! Ali “El Babas” ataca de nuevo, el tal Ali “el Babas” es al apodo por el que se conocía a un estafador del mundillo 2.0. como diría el bueno de Ruperto y que hace unos años tuve la suerte o desgracia (mas bien para él) de conocer.

Este personaje aparte de otras estafas, trabajaba con dos que al parecer, las víctimas también llamadas primos o lilas, se tragaban muy bien.

El Bussiness (negocio ¡ojo! Bisnes para los que se la agarran con papel de fumar), funcionaba de la siguiente manera, o bien como el correo recibido por Tolo, ya saben el pobre hombre enfermo y al borde de la muerte, pero podrido de dinero, o bien como el del familiar lejano fallecido en un accidente o catástrofe natural.
En este último el primo o lila, como usted desee llamarlo recibe un correo electrónico o incluso antiguamente una carta de correo ordinario, donde se le informa del fallecimiento de un pariente lejano, tan lejano que ni el primo o lila lo conoce, pero que a su muerte el tío esta forrado de pasta y no hay más heredero en la faz de la tierra que el destinatario de la misiva.

Hasta aquí todo es idílico, la pesadilla empieza en pagar los supuestos tramites, tasas e impuestos ideados por los estafadores para que el incauto cobre la pasta, el primo va haciendo pagos a través de transferencias bancarias a entidades extranjeras, al principio pequeñas cantidades, hasta que algunas de las víctimas cegadas por el cobro esa supuesta fortuna, han llegado a pagar sumas considerables.

Tarde o temprano todo se descubre, los pagos se esfuman y del tío moribundo hace “mutis por el foro” o pariente lejano muerto, si lo hubo no me acuerdo, a este tipo de estafas se las conoce en el mundillo “lumpen” como el timo de los nigerianos, y son fácilmente reconocidas por un detalle que dijo Tolo en su podcast, aparte de la increíble historia que cuentan, casi siempre las cartas son escritas en un idioma distinto al de la víctima utilizando para su traducción el traductor de Google, por lo que resulta un poco extraña su posterior redacción y estructura gramatical.


Como ves Tolo, esto si son “pirulas” y no lo del avistamiento OVNI de la Villa-Franca.

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