Hay veces que uno piensa
que existen temas en este mundo que te terminan persiguiendo, entre
ellos, el tema de la Chica de la Curva.
Después de la
publicación de los post en este blog de los sucesos relacionados con
los mensajes de “WhatsApp”, pensaba yo que el tema de la Chica de
la Curva había quedado zanjado, todo se resumía a eso, aun burdo
montaje viral propagado a través del “WhatsApp”, una simple
broma.
Pues mira tu por donde,
si y no, ya que detrás de toda esta historia, esta otra historia más
común, pero no menos sorprendente.
Resulta que la otra noche
estuve tomando café con un conocido Agente de la Autoridad de la
Villa-Franca, aunque esta persona me ha dicho que no le importa que
aquí se publique su nombre y cargo, veo más prudente y de mejor
gusto omitir estos datos, ya que los mismos no son importantes para
la narración de la historia. Esta persona me decía:
-¿Te has enterado de lo Chica de la Curva?.
-Claro, dije yo, ¿te refieres al falso periódico que han mandado por “WhatsApp”?.
-Si eso seria cosa de un cachondo mental, pero no, me refiero a lo que realmente paso.
-¿Pero paso algo?. Pregunte yo.
-Veras, sabes que estado de vacaciones, pues bien el otro día cuando me dirigía a mi casa, me paro una vecina de la localidad, y me dijo que cuando venía de Alcaźar había visto en la carretera a una chica de unos veintidós años, vestida con un vestido de color blanco azulado, con un chaquetón amarillo, que venia hacia Villafranca, y que aunque llevaba calzado, le había llamado la atención debido al frío que hacia, que no llevara puestas medias o calcetines, y que además el gesto de la cara le había parecido raro, como “ido”.
Le informe que podía llamar a ciertos servicios de urgencia, pero como vi que esto no le convencía mucho, propuse que fuéramos al lugar en su coche y ver de que se trataba.
Dicho y hecho, nos trasladamos al lugar y antes de llegar al río, vimos a la extraña muchacha.
Al llegar a su altura, estuve hablando con ella, y me dijo que era de Alcázar y que iba a Herencia a buscar a sus amigas, la convencí para que me dijera donde vivía y en el coche de la vecina de Villafranca la llevamos a Alcázar, la dejamos en su domicilio y allí su madre nos explico que su hija estaba en tratamiento psicológico.
Pero resulta que antes de encontrar a la muchacha, varios usuarios de la vía habían avistado a esta chica y habían avisado a los servicios de emergencia, después supe que varias patrullas de la Guardia Civil entre ellas una de Trafico habían estado patrullando la vía para intentar avistarla.
Estando ya en mi casa, me entere por mi hija de lo del mensaje de “WhatsApp” y de las tonterías que allí se decían.
-¡Joder!, vaya historia, ¿la puedo publicar en mi blog?.Pregunte yo.
-¿Que blog?.Pregunto él.
-Uno en donde hablo de la Chica de la Curva.
-Claro, publica lo que quieras, pero ¿por que le llamas la chica de la curva?, si cuando la encontré yo, estaba andando por una recta de la carretera.
Lo crean o no, esta
respuesta me dejo perplejo, ya que si lo piensan fríamente, tenía
toda la razón.
-Ya sabes cosas de Friki, dije yo.
Ya ven detrás de todo
este asunto lo único que hay es un altruista y meritorio servicio
de ayuda humanitario por parte de dos vecinos de esta Villa.
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